por
Miguel Etchandy
publicado en Revista 'Bebidas & Cía' (edición Abril)
Los
vinos según la cantidad de uvas que se utilicen en su composición, pueden clasificarse en
varietales o de corte.
Los
vinos varietales tal como lo indica la palabra son todos aquellos, ya
sea blancos, rosados o tintos, en los que se utiliza una sola variedad de
uva en un porcentaje mayoritario (al menos un 85% según normativa
vigente de INAVI en Uruguay). Pueden utilizarse otra/s cepa/s en
porcentaje menor al 15%, y de cualquier manera al vino conservará el
rótulo de vino varietal.
La
cepa principal es la que debe aparecer mencionada en la etiqueta del
vino, y no necesariamente las minoritarias.
Las
variedades más reconocibles en Uruguay, son las que se ven
habitualmente en las etiquetas de vinos del país y la región. En
el caso de blancos: chardonnay, sauvignon blanc, viognier, sauvignon
gris, gewurztraminer, albariño, riesling. marsanne, petit manseng,
torrontés, trebbiano, malvasía, moscato y pinot blanco, pinot
grigio, etc.
Las variedades tintas pueden ser: tannat, cabernet
sauvignon, merlot, pinot noir, cabernet franc, syrah, tempranillo,
marselan, malbec, carmenere, sangiovese, arinarnoa, garnacha,
nebbiolo, nero d'avola, bonarda, etc.
Por
otra parte los vinos de corte son aquellos en los que aparecen al
menos dos o más variedades de uvas, y ninguna posee un porcentaje
tan alto como en el caso de los vinos varietales (85%), sino que la
participación es en porcentajes menores.
Tanto
blancos, rosados, como tintos pueden ser vinos de corte.
Hay
dos formas fundamentales de elaboración de vinos de corte, que
obviamente dan como resultado vinos diferentes.
El
método Coupage, reconocido por ser el característico de la
denominación francesa de Bordeaux, por el cual las distintas
variedades que integran un vino (en el caso de Bordeaux son
generalmente 3), se vinifican por separado, y luego se mezclan y se
destinan a la guarda (si es necesario) y se embotellan.
El
método Assemblage reconocido en los vinos Chateauneuf du Pape (en la
región del Rhone/ Sur de Francia), las diferentes uvas que darán
origen al vino (suelen ser 13 en este caso) se mezclan todas, es
decir se vinifican todas juntas, y luego que el vino está pronto se
embotella o se destina a la guarda.
No
se puede identificar a uno u otro estilo (varietal o corte), que dé
lugar a vinos de mayor o menor calidad. Simplemente el resultado que
se obtiene es distinto. Existen grandes vinos de las principales
regiones vitivinícolas del mundo que guardan uno u otro estilo.
En
Europa por ejemplo de donde surge la clasificación, existe el caso
de grandes vinos varietales, como son los provenientes de
denominaciones de origen: Bourgogne y Alsacia (Francia). Y también
otras regiones igualmente destacadas que producen vinos de corte:
Bordeaux omo decíamos, Rioja, Ribera del Duero, D'Ouro (Portugal),
Sauternes, Val du Loire, Val du Rhone, Chianti, Amarone, Bruello di
Montalcino, etc.
En
el Nuevo Mundo, es decir en nuestros países, quizás es más
frecuente encontrar vinos varietales, pero esa ha sido una
estrategia comercial (para hacer más fácil el acceso a los vinos,)
que adoptaron estos países para competir en el gran mercado mundial
con las viejas denominaciones europeas que antes mencionábamos, y
que en su mayoría elaboran vinos de corte.
Pero
nada de esto significa que un estilo de vinos sea mejor que otro. Ni
mejores, ni peores, simplemente diferentes.